RET de nuestras prendas y cómo prevenir el estrés térmico por calor

El estrés térmico por calor es la carga de calor que los trabajadores reciben y acumulan en su cuerpo y que resulta de la interacción entre las condiciones ambientales del lugar donde trabajan, la actividad física que realizan y la ropa que llevan.

En este artículo os explicaremos las principales causas, consejos y qué debemos tener en cuenta a la hora de escoger una prenda de ropa laboral.

¿Cómo prevenir el estrés térmico por calor?

Medidas para prevenir el estrés térmico

  • Conseguir un ambiente de trabajo lo más fresco y seco posible.
  • Disminuir la intensidad del trabajo en las horas de mayor insolación (en torno al mediodía), realizando descansos periódicos.
  • Llevar ropa lo más fresca posible (camisa de manga corta y pantalón corto).

Para que la ropa sea lo más fresca posible debe ser lo más transpirable posible. La transpirabilidad de la prenda es la capacidad que tiene un tejido/prenda para expulsar al exterior la humedad interior, principalmente el sudor en nuestra aplicación y que consigue que el usuario permanezca seco.

Aquí cobra importancia el parámetro RET como medida de transpirabilidad.

¿Qué es el RET?

El RET es la resistencia textil a la evaporación, es decir, la resistencia que ofrece el tejido a que la humedad atraviese dicho tejido.

A menor RET mayor transpirabilidad:

  • RET < 6: Muy bueno: Extremadamente transpirable. Confort durante actividad intensa (por ejemplo, carreras en montaña).

  • RET 6-13 Bueno: Muy transpirable. Confort en actividad moderada (actividad aeróbica moderada)

  • RET 13-20 Normal: Transpirable, pero poco confort en actividad.

  • RET 20-30 Deficiente: Apenas transpirable. Mínimo confort en actividad.

  • RET 30+ Muy deficiente: No transpirable. Sin confort en actividad.

A menor RET la prenda será más transpirable, es decir, tendrá un alta grado de permeabilidad frente al vapor de agua.

(La permeabilidad al vapor es una característica de los materiales que nos indica la mayor o menor facilidad que presenta un material en dejar pasar el vapor a través de su masa)

¿Qué RET tienen nuestras prendas?

Cada una de nuestras prendas está certificada individualmente y lo mejor es que nos realices la consulta directamente si tienes dudas con alguna en concreto.De todas formas, os hacemos un resumen aproximado del RET que tienen nuestros tejidos:

  • 100% poliéster (tejidos técnicos) = RET <2

  • 55% algodón y 35% poliéster (tejidos piqué) = RET <3

  • 35% algodón y 65% poliéster (tejidos sarga) = RET 2,5

  • 100% algodón (tejidos sarga) = RET 4

  • 3% elastano, 32% algodón y 65% poliéster (tejidos sarga elástica) = RET 9.6 (como excede se realiza el ensayo de permeabilidad de agua dando un valor de 0.2)

¿Qué causa estrés térmico?

La principal causa del estrés térmico es la existencia de ambientes de trabajo desfavorables, es decir, el ambiente no es confortable para los trabajadores bien sea para su estancia en un determinado lugar o para la realización de sus tareas.

Entre otros factores personales de riesgo que reducen la tolerancia individual al estrés térmico, se encuentran la edad, la obesidad, la hidratación, el consumo de medicamentos o bebidas alcohólicas, el género y la aclimatación.

Edad

El riesgo a sufrir las consecuencias del estrés térmico es “a priori” independiente de la edad, siempre que el individuo tenga un adecuado sistema cardiovascular, respiratorio y de sudoración, unos buenos reflejos, se encuentre totalmente hidratado y en buen estado de salud. De todas formas, se debe considerar que las personas de mayor edad son más susceptibles a padecer problemas de control de la circulación periférica o menor capacidad de mantener la hidratación y, en consecuencia, verse incrementada su vulnerabilidad al estrés térmico.

Obesidad

La persona con sobrepeso presenta una serie de desventajas a la hora de enfrentarse a una situación de estrés térmico debido al incremento del aislamiento térmico que sufre el cuerpo, las posibles deficiencias del sistema cardiovascular y la baja condición física. De todas formas, existen excepciones, por lo que se deben analizar de manera específica los requerimientos individuales de cada persona a la hora de evaluar el riesgo de exposición al estrés térmico para cada trabajador.

Hidratación

El cuerpo pierde agua por difusión a través de la piel y por la respiración, pero principalmente la pérdida de agua durante una situación de estrés térmico se produce mediante la sudoración. La rehidratación bebiendo agua es efectiva y rápida. El problema es que mantener la hidratación adecuada no es fácil, debido entre otros factores a que la sensación de sed no es siempre proporcional a la pérdida de agua.

Medicamentos y bebidas alcohólicas

Existen medicamentos anticolinérgicos que pueden llegar a inhibir la sudoración especialmente en individuos de mayor edad. Algunos sedantes afectan a la sensación de sed, otros fármacos intervienen en la termorregulación, incrementan el calor metabólico y reducen la distribución del calor, condicionando la circulación periférica. En relación con el alcohol, produce vasodilatación periférica y diuresis, que afectan a la respuesta del cuerpo al estrés térmico. Asimismo, bajas dosis de alcohol reducen la capacidad de termorregulación, incluyendo los reflejos vasomotores y la sudoración, y aumentan la probabilidad de una bajada de tensión durante la exposición.

Género

Son difícilmente demostrables las diferencias en la respuesta al estrés térmico entre hombres y mujeres, debido a que la respuesta al calor puede estar enmascarada por la condición física y el nivel de aclimatación. Existen estudios en los que se ha observado infertilidad temporal para hombres y mujeres cuando la temperatura interna alcanza los 38 °C. También se ha observado que durante el primer trimestre de embarazo existe riego de malformación en el feto cuando la temperatura interna de la madre excede los 39 °C en un periodo prolongado.

Aclimatación

La aclimatación es un proceso gradual que puede durar de 7 a 14 días en los que el cuerpo se va adaptando a realizar una determinada actividad física en condiciones de calor (se recomienda que el primer día de trabajo la exposición al calor se reduzca a la mitad de la jornada; después día a día se debería aumentar progresivamente el tiempo de trabajo (10%) hasta la jornada completa. La aclimatación es específica para unas determinadas condiciones ambientales y de ropa, por lo que no se garantiza la respuesta cuando se cambian dichas condiciones. Aunque la aclimatación se produce rápidamente durante el periodo de exposición al calor, también se pierde muy rápidamente cuando se interrumpe la exposición (una o dos semanas sin exposición requieren de 4 a 7 días para volver a recuperar la aclimatación). Los beneficios de la aclimatación consisten en mejorar la efectividad y la eficiencia del sistema de distribución y pérdida de calor, mejorar el confort en la exposición al calor y dificultar la parición de sobrecarga térmica

Efectos sobre la salud de la exposición al calor

Además de los posibles efectos de la exposición al calor que se relatan a continuación, se debe tener en cuenta el incremento del nivel de estrés térmico como un factor que, junto con otros puede dar lugar a accidentes (p.e atrapamientos, golpes o caídas al mismo o distinto nivel derivadas de mareos o desvanecimientos, etc.).

Síncope por calor

La pérdida de conciencia o desmayo son signos de alar-ma de sobrecarga térmica. La permanencia de pie o inmóvil durante mucho tiempo en un ambiente caluroso con cambio rápido de postura puede producir una bajada de tensión con disminución de caudal sanguíneo que llega al cerebro. Normalmente se produce en trabajadores no aclimatados al principio de la exposición al calor.

Deshidratación y pérdida de electrolitos

La exposición prolongada al calor implica una pérdida de agua y electrolitos a través de la sudoración. La sed no es un buen indicador de la deshidratación. Un fallo en la rehidratación del cuerpo y en los niveles de electrolitos se traduce en problemas gastrointestinales y calambres musculares.

Agotamiento por calor

Se produce principalmente cuando existe una gran deshidratación. Los síntomas incluyen la pérdida de capacidad de trabajo, disminución de las habilidades psicomotoras, náuseas, fatiga, etc. Si no es una situación muy grave, con la rehidratación y el reposo se produce la recuperación del individuo.

Golpe de calor

Se desarrolla cuando la termorregulación ha sido superada, y el cuerpo ha utilizado la mayoría de sus defensas para combatir la hipertermia (aumento de la temperatura interna por encima de la habitual). Se caracteriza por un incremento elevado de la temperatura interna por encima de 40,5 °C, y la piel caliente y seca debido a que no se produce sudoración. En este caso es necesaria la asistencia médica y hospitalización debido a que las consecuencias pueden mantenerse durante algunos días.

Published On: 05/06/2023|Categorías: Normativas|Etiquetas: |

RET de nuestras prendas y cómo prevenir el estrés térmico por calor

El estrés térmico por calor es la carga de calor que los trabajadores reciben y acumulan en su cuerpo y que resulta de la interacción entre las condiciones ambientales del lugar donde trabajan, la actividad física que realizan y la ropa que llevan.

En este artículo os explicaremos las principales causas, consejos y qué debemos tener en cuenta a la hora de escoger una prenda de ropa laboral.

¿Cómo prevenir el estrés térmico por calor?

Medidas para prevenir el estrés térmico

  • Conseguir un ambiente de trabajo lo más fresco y seco posible.
  • Disminuir la intensidad del trabajo en las horas de mayor insolación (en torno al mediodía), realizando descansos periódicos.
  • Llevar ropa lo más fresca posible (camisa de manga corta y pantalón corto).

Para que la ropa sea lo más fresca posible debe ser lo más transpirable posible. La transpirabilidad de la prenda es la capacidad que tiene un tejido/prenda para expulsar al exterior la humedad interior, principalmente el sudor en nuestra aplicación y que consigue que el usuario permanezca seco.

Aquí cobra importancia el parámetro RET como medida de transpirabilidad.

¿Qué es el RET?

El RET es la resistencia textil a la evaporación, es decir, la resistencia que ofrece el tejido a que la humedad atraviese dicho tejido.

A menor RET mayor transpirabilidad:

  • RET < 6: Muy bueno: Extremadamente transpirable. Confort durante actividad intensa (por ejemplo, carreras en montaña).

  • RET 6-13 Bueno: Muy transpirable. Confort en actividad moderada (actividad aeróbica moderada)

  • RET 13-20 Normal: Transpirable, pero poco confort en actividad.

  • RET 20-30 Deficiente: Apenas transpirable. Mínimo confort en actividad.

  • RET 30+ Muy deficiente: No transpirable. Sin confort en actividad.

A menor RET la prenda será más transpirable, es decir, tendrá un alta grado de permeabilidad frente al vapor de agua.

(La permeabilidad al vapor es una característica de los materiales que nos indica la mayor o menor facilidad que presenta un material en dejar pasar el vapor a través de su masa)

¿Qué RET tienen nuestras prendas?

Cada una de nuestras prendas está certificada individualmente y lo mejor es que nos realices la consulta directamente si tienes dudas con alguna en concreto.De todas formas, os hacemos un resumen aproximado del RET que tienen nuestros tejidos:

  • 100% poliéster (tejidos técnicos) = RET <2

  • 55% algodón y 35% poliéster (tejidos piqué) = RET <3

  • 35% algodón y 65% poliéster (tejidos sarga) = RET 2,5

  • 100% algodón (tejidos sarga) = RET 4

  • 3% elastano, 32% algodón y 65% poliéster (tejidos sarga elástica) = RET 9.6 (como excede se realiza el ensayo de permeabilidad de agua dando un valor de 0.2)

¿Qué causa estrés térmico?

La principal causa del estrés térmico es la existencia de ambientes de trabajo desfavorables, es decir, el ambiente no es confortable para los trabajadores bien sea para su estancia en un determinado lugar o para la realización de sus tareas.

Entre otros factores personales de riesgo que reducen la tolerancia individual al estrés térmico, se encuentran la edad, la obesidad, la hidratación, el consumo de medicamentos o bebidas alcohólicas, el género y la aclimatación.

Edad

El riesgo a sufrir las consecuencias del estrés térmico es “a priori” independiente de la edad, siempre que el individuo tenga un adecuado sistema cardiovascular, respiratorio y de sudoración, unos buenos reflejos, se encuentre totalmente hidratado y en buen estado de salud. De todas formas, se debe considerar que las personas de mayor edad son más susceptibles a padecer problemas de control de la circulación periférica o menor capacidad de mantener la hidratación y, en consecuencia, verse incrementada su vulnerabilidad al estrés térmico.

Obesidad

La persona con sobrepeso presenta una serie de desventajas a la hora de enfrentarse a una situación de estrés térmico debido al incremento del aislamiento térmico que sufre el cuerpo, las posibles deficiencias del sistema cardiovascular y la baja condición física. De todas formas, existen excepciones, por lo que se deben analizar de manera específica los requerimientos individuales de cada persona a la hora de evaluar el riesgo de exposición al estrés térmico para cada trabajador.

Hidratación

El cuerpo pierde agua por difusión a través de la piel y por la respiración, pero principalmente la pérdida de agua durante una situación de estrés térmico se produce mediante la sudoración. La rehidratación bebiendo agua es efectiva y rápida. El problema es que mantener la hidratación adecuada no es fácil, debido entre otros factores a que la sensación de sed no es siempre proporcional a la pérdida de agua.

Medicamentos y bebidas alcohólicas

Existen medicamentos anticolinérgicos que pueden llegar a inhibir la sudoración especialmente en individuos de mayor edad. Algunos sedantes afectan a la sensación de sed, otros fármacos intervienen en la termorregulación, incrementan el calor metabólico y reducen la distribución del calor, condicionando la circulación periférica. En relación con el alcohol, produce vasodilatación periférica y diuresis, que afectan a la respuesta del cuerpo al estrés térmico. Asimismo, bajas dosis de alcohol reducen la capacidad de termorregulación, incluyendo los reflejos vasomotores y la sudoración, y aumentan la probabilidad de una bajada de tensión durante la exposición.

Género

Son difícilmente demostrables las diferencias en la respuesta al estrés térmico entre hombres y mujeres, debido a que la respuesta al calor puede estar enmascarada por la condición física y el nivel de aclimatación. Existen estudios en los que se ha observado infertilidad temporal para hombres y mujeres cuando la temperatura interna alcanza los 38 °C. También se ha observado que durante el primer trimestre de embarazo existe riego de malformación en el feto cuando la temperatura interna de la madre excede los 39 °C en un periodo prolongado.

Aclimatación

La aclimatación es un proceso gradual que puede durar de 7 a 14 días en los que el cuerpo se va adaptando a realizar una determinada actividad física en condiciones de calor (se recomienda que el primer día de trabajo la exposición al calor se reduzca a la mitad de la jornada; después día a día se debería aumentar progresivamente el tiempo de trabajo (10%) hasta la jornada completa. La aclimatación es específica para unas determinadas condiciones ambientales y de ropa, por lo que no se garantiza la respuesta cuando se cambian dichas condiciones. Aunque la aclimatación se produce rápidamente durante el periodo de exposición al calor, también se pierde muy rápidamente cuando se interrumpe la exposición (una o dos semanas sin exposición requieren de 4 a 7 días para volver a recuperar la aclimatación). Los beneficios de la aclimatación consisten en mejorar la efectividad y la eficiencia del sistema de distribución y pérdida de calor, mejorar el confort en la exposición al calor y dificultar la parición de sobrecarga térmica

Efectos sobre la salud de la exposición al calor

Además de los posibles efectos de la exposición al calor que se relatan a continuación, se debe tener en cuenta el incremento del nivel de estrés térmico como un factor que, junto con otros puede dar lugar a accidentes (p.e atrapamientos, golpes o caídas al mismo o distinto nivel derivadas de mareos o desvanecimientos, etc.).

Síncope por calor

La pérdida de conciencia o desmayo son signos de alar-ma de sobrecarga térmica. La permanencia de pie o inmóvil durante mucho tiempo en un ambiente caluroso con cambio rápido de postura puede producir una bajada de tensión con disminución de caudal sanguíneo que llega al cerebro. Normalmente se produce en trabajadores no aclimatados al principio de la exposición al calor.

Deshidratación y pérdida de electrolitos

La exposición prolongada al calor implica una pérdida de agua y electrolitos a través de la sudoración. La sed no es un buen indicador de la deshidratación. Un fallo en la rehidratación del cuerpo y en los niveles de electrolitos se traduce en problemas gastrointestinales y calambres musculares.

Agotamiento por calor

Se produce principalmente cuando existe una gran deshidratación. Los síntomas incluyen la pérdida de capacidad de trabajo, disminución de las habilidades psicomotoras, náuseas, fatiga, etc. Si no es una situación muy grave, con la rehidratación y el reposo se produce la recuperación del individuo.

Golpe de calor

Se desarrolla cuando la termorregulación ha sido superada, y el cuerpo ha utilizado la mayoría de sus defensas para combatir la hipertermia (aumento de la temperatura interna por encima de la habitual). Se caracteriza por un incremento elevado de la temperatura interna por encima de 40,5 °C, y la piel caliente y seca debido a que no se produce sudoración. En este caso es necesaria la asistencia médica y hospitalización debido a que las consecuencias pueden mantenerse durante algunos días.

Published On: 05/06/2023|Categorías: Normativas|Etiquetas: |